El principio de caja consiste en que el IVA se declarará en el periodo en el cual se paga la factura, así sea que el hecho generador o la transacción comercial se halla hecho en el pasado. Por ejemplo, si una persona solcita un servicio o compra un producto en julio de 2013 pero paga la respectiva factura en septiembre-2013, el IVA a declarar corresponde a éste ultimo período.